Ayer finalizó “Equilátero”, en La Parrala, el proyecto de la compañía teatral burgalesa Molécula Escénica galardonado en el “Concurso de proyectos culturales Burgos 2031” que puso en marcha Promueve Burgos. Todo un éxito de participación, de público y de críticas.
Su desarrollo consistió en la realización de varias sesiones de workshops con grupos de adolescentes y de tercera edad (más de 200 personas implicadas) donde el concepto de la Inteligencia artificial y sus consecuencias estaba en el leit motiv inicial.
Estos encuentros dieron como resultado dos piezas de teatro de una duración de 30 minutos que se escenificaron en dos espacios referentes de la ciudad, pero que no programan artes escénicas habitualmente, con tres sesiones con cada obra teatral.
Con la selección musical de Erik Niemietz, mezclando así artes escénicas con exposiciones de pintura, escultura o fotografía.
“Baby Jaimy” se estrenó el 17 de Mayo en el Centro de Arte Caja de Burgos (CAB), con tres sesiones donde 120 personas pudieron disfrutar de una curiosa lucha entre la música clásica y moderna.
“Gloria de su padre” se estrenó el 18 de Mayo en la Sala de exposiciones “Pedro Torrecilla” de la Fundación círculo, donde 120 personas pudieron conocer la historia de la última reina de Egipto en los tres pases realizados.
Por último, los días 21 y 22 de Mayo, Molécula Escénica llevó a cabo en el Centro de creación escénica “La Parrala” pases de las piezas para los grupos que habían participado en el proceso, reuniendo a más de 100 personas que, además, pudieron visitar el centro y conocer la destacable labor artística que se realiza en él.